El Ayuntamiento de Polanco, a través de la empresa encargada de la recogida de basuras en el municipio, invertirá cerca de 9.000 euros en la instalación de casi medio centenar de soportes de acero inoxidable para sujetar los contenedores de 400 y 200 litros de capacidad, e impedir que se desplacen y causen daños en invierno o cuando se producen fuertes vientos.
Esa nueva inversión se lleva a cabo tras concluir hace unos meses una primera actuación que supuso la colocación de una treintena estos soportes en los contenedores de residuos sólidos de mayor capacidad (de unos 800 litros), que por su tamaño resultaban más peligrosos si se desplazaban de sus ubicaciones y causaban accidentes o siniestrados.
La alcaldesa de Polanco, Rosa Díaz Fernández, explica que esta actuación se concreta en la adquisición e instalación de 36 soportes para otros tantos contenedores de 400 litros y otros 12 para los de 200, hasta completar la práctica totalidad de los repartidos por el municipio.
En este sentido, destaca que estas instalaciones es una las mejoras introducidas en el último contrato para la recogida de basuras atendiendo una demanda vecinal, tras una inicial actuación por cuenta municipal que dio buenos resultados, por lo que se decidió extenderla a todo el municipio.
Rosa Díaz recuerda que el pasado año la Concejalía de Obras encargó a los servicios técnicos municipales el diseño de un sistema para solucionar este problema, que se materializó en las colocación de unos soportes de acero inoxidable parta inmovilizar los grandes cubos de basura e impedir que se desplacen.
La alcaldesa destaca que esta actuación también mejorará la propia recogida al evitar el vertido de los residuos en las calles, un problema que se había detectado en algunos barrios, y que con la medida adoptada se elimina por completo.
Además, anuncia que el Ayuntamiento tiene previsto implementar nuevas medidas con el objetivo de mejorar la prestación del servicio de recogida, siguiendo la línea de anteriores acciones municipales.
El servicio de recogida retira en la actualidad unas 200 toneladas/mes de residuos urbanos en el municipio. En primera instancia, estos residuos se trasladan a las instalaciones que la empresa Mare tiene en El Mazo, desde donde una vez compactados se remiten a las dependencias de la planta integral de tratamiento de Meruelo donde se lleva a cabo el reciclaje y el aprovechamiento energético de las basuras.
