El Ayuntamiento de Polanco, dentro de un proyecto de mejora de la seguridad vial en los viales municipales, ha procedido a pintar una nueva señalización horizontal en las tres carreteras con más tráfico, una actuación que se desarrolla sobre cerca de 15.000 metros de longitud.
Debido a su uso, las anteriores señales pintadas sobre el asfalto se encontraban deterioradas o borradas, de forma que la ausencia de referencias tanto en el eje central de la calzada como en los arcenes hacía peligroso el cruce de vehículos o la circulación de peatones.

Los viales objeto de esta actuación son el que discurre por la Cuesta Quintana, desde la rotonda de la Casa Joven hasta el puente sobre el Río Cabo en Rinconeda; y el que conecta la glorieta de acceso al cementerio hasta su enlace con la antigua carretera nacional N-611, a través del Barrio San Pedro.
También se actuará sobre el vial de La Jerra, que une la rotonda de la Casa Joven hasta su conexión con la carretera nacional N-634 en Requejada, junto al colegio Pérez Galdós, además de otro pequeño tramo en las proximidades, el que une la N-634 y el pabellón polideportivo cruzando por delante del aula de 0 a 2 años.

El concejal de Obras, Avelino Rodríguez Muriedas, anuncia que este tipo de actuaciones de mejora de la seguridad vial se seguirán ejecutado en otras carreteras de titulidad municipal, tanto con trabajos de adecuación del firme como de señalización, en función de las recomendaciones de los técnicos.
Recuerda que el Ayuntamiento ya completó a finales del pasado año el último plan de asfaltado de carreteras que incluyó una veintena de actuaciones, y que permitió la eliminación de baches en cerca de 1.200 metros cuadrados de caminos en Mijares, Rinconeda, Mar o Posadillo.
Además, se instalaron elementos reductores de la velocidad, los conocidos como ‘lomos de burro’, en aquellos puntos de las carreteras municipales donde los vecinos se han quejado del paso de vehículos sin respetar los límites.